Rueda
Denominación de Origen Rueda
La Denominación de Origen Rueda fue reconocida el día 12 de enero de 1980 por orden del Ministerio de Agricultura, siendo la primera Denominación de Origen reconocida en la Comunidad Autónoma de Castilla y León, tras varios años trabajando por el reconocimiento y protección de su variedad autóctona: la Verdejo.
La Denominación de Origen Rueda cuenta con unos medios naturales muy favorables para la producción de vinos de alta calidad, siendo una zona especializada en la elaboración de vinos blancos, de amplio reconocimiento internacional. Así mismo, desde el 5 de agosto de 2008 los vinos tintos y rosados se encuentran amparados por la Denominación de Origen Rueda fecha en la que se publica el actual reglamento de la D.O. Rueda en el Boletín Oficial de Castilla y León.
Rueda es una de las denominaciones de origen mas antiguas de Castilla y León y sus vinos cuentan que se vienen cultivando desde la Edad Media.
Situación:
En las provincias de Valladolid (53 municipios), Segovia (17 municipios) y Ávila (2 municipios). El viñedo ocupa zonas onduladas de la meseta y está condicionado por la influencia del Duero que recorre la parte norte de la zona.
Variedades:
Blancas: verdejo, viura, sauvigmon blanc y palomino fino.
Tintas: tempranillo, cabernet sauvignon, merlot y garnacha.
Suelos:
Con gran concentración de cantos rodados en la superficie. Son terrenos cascajosos, pobres en materia orgánica, con buena aireación y drenaje. Latextura de los suelos es variable, aunque en general predominan los terrenos arenolimosos y limosos.
Clima:
Se tipo Continental, con inviernos fríos y veranos cortos y calurosos. La pluviometría se concentra sobre todo en primavera y otoño. La altitud media de la zona se sitúa entre kis 600 y 700 metros y sólo en la provincia de Segovia se alcanzan alturas superiores a los 800 metros.
Características Generales de los vinos:
Blancos: Se elaboran fundamentalmente a partir de verdejo. A medida que aumenta la participación de esta uva (desde el Rueda al Rueda Verdejo) se obtiene un estilo más caracterizado. De color pajizo verdoso, ofrecen aromas finos y elegantes, frutosos, con matices de hinojo, menta y manzana. En boca son frescos, afrutados y con un característico paso de boca amargoso que contrasta con la sensación de uva madura, dulcedumbre y frescura. Los elaborados con sauvignon blanc presentan toques cítricos y una acidez más marcada que le aporta mayor frescura. Es habitual encontrar también exuberantes matices a fruta tropical.
Tintos: Se apoyan fundamentalmente en la tempranillo. Son de color cereza bastante intenso, afrutados, carnosos y sabrosos; pueden recordar a los tintos de Cigales
Espumosos: Elaborados por el método tradicional de segunda fermentación en botella. Frescos y con toques de levaduras, aunque en general algo más pesados que los cavas.
Foto: Viñedos característicos de Rueda.