Bodegas Emilio Moro
BODEGAS EMILIO MORO
Emilio Moro nació en 1932 en Pesquera de Duero, una de las comarcas vinícolas más codiciada de España. Siendo niño, Emilio Moro pisaba la uva en los lagares de su pueblo, y a los 14 años vendía junto a su padre cántaras de vino en la zona. Eran tiempos en los que el mosto se almacenaba en aquellos viejos lagares antes de pasar a los toneles de madera.
En 1987 Emilio Moro y sus hijos, José y Javier, decidieron elaborar y comercializar sus propios vinos, apostando por viñas de clones autóctonos de Tinto Fino, frecuentes en las parcelas más viejas del lugar.
Hoy en día, Vinos Emilio Moro posee unas 200 hectáreas propias, fundamentalmente situadas en Pesquera de Duero. En ellas se selecciona el mejor material genético para las nuevas plantaciones, siempre de la variedad Tinto Fino, la única con la que se elaboran los vinos de esta bodega.
Vino Emilio Moro
En 1998, Bodegas Emilio Moro suprimió de sus vinos la catalogación de Crianza, Reserva y Gran Reserva. Desde entonces, cada vino tiene su nombre, personalidad e identidad, con el fin de alcanzar la máxima calidad. Exponente de ello son los diferentes reconocimientos que ha obtenido la bodega tanto en el ámbito nacional como internacional.
Suelen decir que tienen fe en su trabajo. Son un equipo unido, una familia que comparte una misma pasión desde hace 3 generaciones. José Moro lo refleja de forma muy clara al recordar su infancia: "Cuando captas eso desde pequeño, ese cariño, ese sacrificio, te queda una consistencia y un orgullo por tu familia que perdura toda la vida". Trabajo, entrega y humildad son la base del sueño que la familia Moro consiguió hacer realidad.
Foto: Parque de barricas de Bodegas Emilio Moro.