Conforme se acerca el 25 de diciembre, nuestra agenda se aprieta de eventos, celebraciones y festividades. Llegan las comidas de empresa; las largas cenas con amigos, que acaban al amanecer; las reuniones familiares de las que saldremos con unos cuantos kilitos de más y las congregaciones en general . Llegan tiempos de juntarse y comer, ser felices y hacer regalos. ¿Pero qué regalos? Cómo bien hemos dicho, Navidad es sinónimo de comer acompañado, ¿y qué mejor acompañamiento que un buen vino? He aquí 3 situaciones en las que el mejor regalo será que tú lleves el vino.
Situaciones en las que regalar vino
¿Qué le regalo a mis padres?
Año tras año nos hacemos la misma pregunta, ¿qué le regalo a mis padres? La respuesta es más sencilla de lo que pensamos, ya que, seguramente nuestros padres tengan una agenda navideña tan apretada como la nuestra, llena de reuniones y compromisos. Así que, ¿por qué no regalar vino? Existen packs de vino con selecciones aptas para todos los gustos y para todos los bolsillos. Con un pack de vino podrás impresionar a tus padres sin gastarte una fortuna y llenar sus botelleros. Quizá sean ellos los que lleven el vino en sus próximas celebraciones.
Esta Navidad conozco a mis suegros
Qué difíciles son las primeras impresiones, sabemos que en cualquier momento podemos fastidiarla hablando de política, olvidando el nombre de nuestro suegro o atragantándonos con el jamón. Por eso debemos llevar un as bajo la manga. De nuevo, nos encontramos ante una situación perfecta para regalar vino.Una buena botella de vino para la cena, puede hacernos ganar puntos y pasar del cero al diez en un abrir y cerrar de ojos. En esta ocasión, debemos tener especial cuidado en la elección del vino. En primer lugar, debemos preguntarnos qué impresión deseamos causar con nuestro regalo y en segundo, escoger el vino. Pero ojo, siempre dentro de nuestras posibilidades, no querremos que nos tomen por un engreído.
Habría que tener un detalle con los amigos
A nuestros amigos les encanta tener un excusa para reunirse en cualquier época del año, pero especialmente en Navidad. De hecho, quizá sea la única oportunidad de sentar a todo el grupo en la misma mesa y de retener a los que viven en el extranjero. Se trata de una ocasión especial y por ello debemos agradecerles las fiestas con un detallito. Podemos obsequiarles con una pequeña botella de nuestro vino favorito para que la consuman cuándo les apetezca. Así tus amigos no podrán evitar acordarse de ti estén dónde estén. No hay mejor forma de recordar que a través de las notas de un buen vino.
Ya sabéis, cualquier ocasión es buena para regalar vino en estas fiestas y para compartirlo con la gente a la que quieres. Que paséis una Feliz Navidad con unas felices comidas y ¡que corra el vino!