Los vinos de Dehesa del Carrizal presumen de haber logrado en varias ocasiones destacados reconocimientos a nivel nacional e internacional, pero sin duda uno de los logros más destacables de la bodega es la alta exquisitez de sus vinos, que se han alzado con la mejor calificación: Vinos de Pago.
Nos adentramos en el corazón de La Mancha para realizar un recorrido por los viñedos, vinos y filosofía de una de las Bodegas más destacadas de Castilla La Mancha.
Localización de la Dehesa del Carrizal: terroir con encanto
Dehesa del Carrizal, ubicada en localidad de Retuerta de Bullaque en Ciudad Real, se rodea de singulares parajes entre las cuencas del Tajo y del Guadiana: el Parque Nacional de Cabañeros y los Montes de Toledo, un entorno maravilloso que recoge las mejores esencias que fructifican en los vinos únicos de calidad. El suelo y el clima en los que se asientan los viñedos de la Dehesa del Carrizal, logran que el vino sea una apuesta de enología responsable.
Las características especiales del terreno donde se sitúan sus viñedos de la Dehesa del Carrizal ofrecen como resultado vinos de calidad, los cuales son alabados con Denominación de Origen de pago.
Historia de la Dehesa del Carrizal: desde sus orígenes hasta el reconocimiento de la Denominación de Origen
La Dehesa del Carrizal, fundada en 1987, contaba en sus comienzos con 8 hectáreas de viñedos, ascendiendo esta cifra actualmente a 26. Desde el inicio, sus fundadores apostaron por un vino con personalidad. El viñedo posee diferentes variedades que dan como resultado vinos únicos, tales como Syrah o Cabernet Sauvignon.
Pocos son los años de historia que la Dehesa del Carrizal tiene que contar pero las experiencias, premios y crecimientos gracias a la enología responsable son superiores a otras bodegas. En 2006 esta singular bodega adquiere uno de los mayores reconocimientos que existen en el mundo vitivinícola, la obtención de la Denominación de Origen de pago.
La bodega posee una Denominación de Origen Protegida que, actualmente, se trata de una distinción limitada a quince bodegas españolas. Dicha denominación se obtiene por el hecho de llevar a cabo todo el proceso de producción en la finca, a partir de viñedos propios y con la utilización de uva cuidadosamente seleccionada. Además, el proceso de elaboración y embotellado del vino, debe realizarse dentro del “pago”.
No todas las bodegas consiguen dicho reconocimiento debido a que necesitan un microclima propio que las diferencie de las de su entorno, obteniendo vinos con cualidades y rasgos dignos de este reconocimiento.
La normativa de elaboración es muy estricta e impone rendimientos bajos, rigurosos tiempos de crianza y exhaustivos controles de calidad que, unidos a la singularidad del enclave, los suelos y el clima, dan como resultado vinos excepcionales.
La Dehesa del Carrizal es como una gran familia y por ello en 2010 se incorpora la familia Villar Mir como un nuevo propietario más. Gracias a esta incorporación, la bodega crece con más eficacia por los diferentes nuevos puntos de vista de este propietario.
La uva como materia prima, es un producto estacional el cual no se puede disponer cuando se quiera sino que precisa tiempos de maduración, por ello se cuida durante todo el año para conseguir vinos únicos y con matices que marcan la diferencia. Todo ello elaborado dentro de la finca para dar como resultado estos vinos tan preciados de los cuales su acidez, frescura y dulzor te atraparán.
Reconocimientos a la Dehesa del Carrizal
La bodega se caracteriza por haber recibido numerosos premios a lo largo del tiempo, destacando el año 2014 con la obtención del reconocimiento de mejor vino de España, el Petit Verdot 2010. Entre ellos se destacan el Gran Bacchus de Oro, uno de los galardones más importantes que equivale a ser elegido el mejor vino del mundo, y el Premio Alimentos de España al Mejor Vino otorgado por el Ministerio de Agricultura.
Además, el resto de vinos de la pequeña bodega, también recibieron destacables premios y menciones a lo largo del dicho año. Entre ellos, destacan las medallas obtenidas por el Chardonnay 2011 en el Decanter World Wine y por el Cabernet Sauvignon 2008 y Syrah 2009 en el Concurso Mundial de Bruselas. A su vez, sus vinos multivarietales MV 2011 y Colección Privada 2009, adquirieron medallas de plata y oro, respectivamente, en el Concurso Internacional CINVE.
A lo largo de 2015, la finca Dehesa del Carrizal, continuó sumando premios y reconocimientos gracias a sus vinos excepcionales, fundamentalmente del año 2011. En concreto, obtuvo catorce medallas (de oro, plata y bronce) por la participación en distintos concursos tales como el CINVE (Concurso Internacional de Vinos y Espirituosos), el Concurso Internacional de Bruselas, los Premios Decanter y el International Wine Challenge. En ellos fueron premiados cada uno de los vinos Dehesa del Carrizal que se encuentran en el mercado: Chardonnay, Syrah, Petit Verdot, Cabernet Sauvignon, MV y Colección Privada.
A partir de la obtención de dichos reconocimientos, en especial de los recibidos por el vino Petit Verdot en el año 2014, las ventas de la bodega aumentaron tanto a nivel nacional, destinando el 30% de su producción, como internacional, el 70% restante de su producción.