Con la llegada de Agosto comienza, en muchos lugares, la preparación previa a la vendimia. Antiguamente la vendimia comenzaba con la llegada del otoño, pero en la actualidad esta tarea se ha adelantado, debido principalmente a las características del clima. Son muchos los aspectos que se han de conocer sobre la vendimia para poder mejorar nuestra cultura sobre el vino, pues es esta una de las faenas más importantes que se realizan en la etapa de producción y elaboración del vino. Dependiendo del tipo de vendimia que se realice los vinos tomarán o no diferentes cualidades.
Características fundamentales de la vendimia
La vendimia da comienzo cuando la uva se encuentra en su punto álgido de madurez. Y para que la uva se encuentre en perfecto estado para ser recolectada hay que prestar atención a criterios como: el tipo de uva, la calidad del suelo y el clima. Estos factores son los encargados de determinar la fecha más adecuada para que dé comienzo la recolección.
Con la vendimia comenzará una de las etapas más importantes para cada agricultor y para las bodegas. A continuación vamos a detallar cada uno de los tres factores que determinarán el comienzo de dicha vendimia, estos factores son analizados por los enólogos o responsables de cada bodega. Estos expertos son los indicados de vigilar los viñedos durante todo el año, con especial atención a partir de verano, para controlar la evolución que están sufriendo y vigilar de cerca si cumplen con las condiciones necesarias para que la vendimia se pueda efectuar con éxito.
El tipo de uva determinará el comienzo de la vendimia
Cada variedad de uva ofrece diferentes tipos de vinos ya que sus características también son diferentes. Si decimos que tienen características diferentes tendrán, por lo tanto, distintas necesidades. Aunque variedades de uvas hay muchas, merece la pena conocer aunque sea los principales tipos de estas.
- Uva blanca. Estas son las utilizadas para producir los vinos blancos. Este tipo de uva, por lo general, madura antes que el resto de uvas tintas. Los vinos blancos necesitan de un gran contenido en azucares que los haga frescos y dulces, de ahí que se exija una rápida maduración. Como hemos dicho existen multitud de variedades blancas, pero la gran mayoría da comienzo en su recolección en el mes de agosto, dependiendo del suelo y clima, los otros dos factores importantes. Las variedades que se encuentran en las zonas cálidas, por norma general, suelen madurar antes que las que encontramos en el centro del país.
- Uva tinta. Este tipo de uva da como resultado los tan apreciados vinos tintos y rosados del país. Como sucedía con las uvas blancas, en este caso, las tintas también presentan más de treinta variedades diferentes. Al disfrutar de una madurez más tardía que en el caso anterior, las uvas tintas suelen comenzar su vendimia a principios de septiembre. Sin embargo hay en algunas zonas donde, la escasez de lluvias y las altas temperaturas, están comenzando a adelantar el proceso de la recolección. En el caso de las uvas tintas, el paso de color verde a morado sería el inicio de la fase final de la maduración.
Independientemente de la variedad, lo primero que habrá que tener claro es el tipo de vino que se quiere obtener, diferenciando si se busca un vino fresco, fuerte o aromático.
La importancia del clima para el comienzo de la vendimia
Ya adelantábamos algo sobre este aspecto en el apartado anterior, el clima es decisivo para el comienzo de la vendimia. No hay una receta exacta a seguir para conseguir el mejor vino, sino sería muy fácil y el mundo del vino es de todo menos fácil. Se entiende por buen proceso cuando el verano no ha sido excesivamente cálido, no ha presentado temperaturas extremas, las noches han sido frescas y se han desarrollado lluvias de carácter ligero al final de la maduración, es decir semanas antes de la recolección. Este podría ser el proceso más óptimo pero, como decíamos, dependerá también del tipo de uva y del suelo.
Calidad del suelo y otros aspectos decisivos para el comienzo de la vendimia
Las características del suelo y cómo se han tratado desde el injerto hasta la maduración del viñedo son uno de los aspectos más importantes para determinar el inicio de la vendimia. Ya no tanto las características en sí del suelo sino más bien la altitud que presente cada suelo determinará la maduración de sus viñedos. Si los viñedos se encuentran localizados en una zona con una mayor altitud, estos presentarán una maduración más tardía, sin embargo en aquellas zonas de baja altitud la maduración será más temprana. Del mismo modo que decíamos que aquellos vinos que se encuentren cerca de zonas cálidas tendrían, por lo tanto, una temprana maduración.
Por lo tanto se puede descubrir que la característica del clima y la calidad del suelo están, en su gran mayoría, relacionadas.
Una vez los enólogos o encargados de producción determinan que estos tres factores, entre otros, han cumplido con lo esperado y puede dar inicio la vendimia, comenzaría la fase de recolección. Aunque los expertos siguen manteniendo la efectividad del método tradicional, cada vez son más los adeptos que opinan que en viñedos de gran extensión es preferible hacer uso de las máquinas indicadas y del proceso mecánico, pues se ahorraría tiempo y esfuerzo. En nuestro artículo Conociendo el paso a paso de la vendimia os hablamos de los tipos de vendimia que existen, sus características y elegimos cual es la más adecuada dependiendo el tipo de elaboración que quieras llevar a cabo.