La historia de Bodegas Riojanas está totalmente involucrada a la historia de la familia Artacho, esta familia cuenta con una honda tradición vitivinícola, y todo empezó cuando en 1890 fundaron Bodegas Riojanas junto con Rafael Carreras. Como signo de esta tradición se encuentran los premios otorgados a sus vinos, con anterioridad a dicha fundación, uno de estos premios fue la medalla de oro de la Exposición Universal de Barcelona en 1888.
Una bodega pionera en el proceso de crianza en botella
Años más tarde de la fundación de Bodegas Riojanas, en 1930 se constituye la denominación social “Román Artacho y Compañía S.L”. Esta denominación social tiene lugar tras la recuperación de la destrucción del viñedo por la filoxera, en este momento ya se avecina una época de prosperidad y de este modo es como Bodegas Riojanas comienza a vender su vino en América.
En 1960, tiene lugar una de las ampliaciones más importantes de todas las que tuvo Bodegas Riojanas. Esta nueva ampliación está enfocada a una filosofía de calidad y deja de lado la venta de vino a granel. Se construyen nuevos depósitos de hormigón, que podrán dar cabida a un millón de litros, nuevos calados para 2600 barricas y un botellero de cinco plantas de altura para el envejecimiento de 700.000 botellas, convirtiéndose así en los pioneros en la importancia del proceso de crianza en botella.
Llas instalaciones de Bodegas Riojanas sufrieron las últimas reformas en 2005, se restauró y acondicionó la bodega original de 1890, creando ahora un salón de actos, una moderna bodega de elaboraciones especiales, así como unas nuevas oficinas.
Elaboración: Una transformación en constante evolución
En sus más de 100 años de historia, los sistemas de elaboración han ido evolucionando. Bodegas Riojanas es una bodega clásica, pero eso no implica hacer un vino antiguo y esto lo decimos porque esta bodega ha incorporado las técnicas de vinificación más avanzadas que permiten una adaptación a las tendencias actuales del mercado.
Esta elaboración modernizada tiene lugar gracias a las más de 300 has de los mejores viñedos en Cenicero, San Vicente de la Sonsierra y localidades de alrededor. La uva por excelencia que se cosecha es el Tempranillo, pero en Bodegas Riojanas encontramos una de las mayores extensiones de Mazuelo y Graciano asentada en suelos arcillo-calcáreos, de este modo consiguen la personalidad tan especial en los vinos que elaboran.
La vendimia
La vendimia tiene lugar, como en la mayoría de lugares de España, a principios de Octubre. En los viñedos más viejos, las partidas de uva se recogen en cajas, para evitar que por el peso se rompan los granos de uva y estos lleguen en el mejor estado a la bodega. Cuando llegan a la bodega, se someten a una meticulosa selección manual racimo a racimo, ya que serán los elegidos para poder elaborar los vinos de mayor calidad de estas bodegas.
La crianza
Como de un reposo se tratará, una vez que la uva se ha convertido ya en vino tras la fermentación, este experimenta un proceso de crianza en barrica y más tarde en botella. Todo este proceso está regulado en primer lugar por el reglamento de la Denominación de Origen Calificada Rioja y siguiendo los criterios de la Dirección Técnica de la bodega.
Desde Vinos Cutanda esperamos que este recorrido por las Bodegas Riojanas os haya parecido interesante, y os haya hecho reflexionar sobre la importancia de las bodegas más antiguas, para aprender de ellas.