Existen diferentes botas de vino, dependiendo de la forma, del estilo o del uso que le vayamos a dar. La bota de vino tradicional española es una de las que más prestigio tiene en el mundo. En este artículo, trataremos de diferenciar los tipos de botas y hablar de las calidades de cada una de ellas.
Marcando la historia desde Grecia
Los primeros testimonios sobre su existencia y uso se remontan a la antigua Grecia. La fabricación de las botas de vino se remonta a la España tradicional. Su uso, antes extendido, se ha ido reduciendo con el paso de los años. Antes en las casas españolas, existían dos elementos fundamentales: el botijo y la bota. No solo ha jugado un papel principal en el día a día de las familias españolas, ha aparecido en la Biblia, en el Quijote de Cervantes y a lo largo de todo el siglo de oro de la literatura española.
La bota de vino, la reina del mundo taurino
La bota se ha relacionado con el mundo del campo y el mundo taurino, sin embargo, sigue ocupando el trono de las fiestas regionales españolas. Si pensáramos que el uso y fabricación de las botas de vino está reducido a la geografía española, estaríamos equivocados. Como hemos dicho, la bota se relaciona con el campo y los toros. Los países sudamericanos cuentan con estos dos aspectos dentro de su cultura y su fabricación y uso fue también extendida a estos países.
Sobre gustos no hay nada escrito
Dentro de los tipos de botas, hay expertos que las diferencian segunda la forma o el material del que están hechos. También se debe tener en cuenta el tamaño o su impermeabilización. El diseño exterior también diferencia unas botas de otras: desde el escudo de nuestro equipo de fútbol favorito hasta el nombre de la peña de nuestro pueblo.
Un interior tradicional o moderno
El interior puede ser de dos materiales, el pez o el látex. Hay dos tipos de bota de vino: las botas de látex no disponen de pez como aislante interior, en su lugar, tienen una funda de látex, con la forma de la bota que contiene el líquido. La bota tradicional, la de nuestros ancestros, está hecha de pez. Si el uso que esperas darle a la bota de vino es para vino, la mejor elección es el interior de pez, pero, si el uso que esperas darle es para agua, bebidas dulces o carbonatadas, deberías elegir el látex. Aunque el material tradicional es el pez, las botas impermeabilizadas con látex son más versátiles.
Una y una forma hacen mil
Existen diferentes formas para la bota de vino: rectas o curvas. Ambas tienen forma de gota de agua, pero la segunda está curvada hacia uno de los lados. Cuando pensabas que la bota de vino era imposible de innovar o cambiar su diseño, existen diferentes fábricas que han decidido dar un paso en la diferenciación con el resto. Por ejemplo, con una bota de vino en forma de balón de Rugby.
El material sí importa
Otra clasificación podría ser el tamaño de las botas de vino, sin embargo, los tamaños más utilizados son de un litro a dos. Dependerá del fabricante y del uso que queremos darle. Existen botas más pequeñas para decoración o caracterizaciones de personas.
Las botas tienen diferentes usos y calidades dependiendo del material del que estén hechas en su exterior: pueden ser elaboradas con materiales más ‘lujosos’, como la piel de cabra, la cual es muy cotizada en este mundillo, o con materias primas más baratas, como la piel sintética. Esta diferencia de calidad entre unas botas y otras no solo se aprecia en la calidad que recubre la piel, también se aprecia en las boquillas y las trenzas que la adornan.
Las botas de vino más baratas suelen estar hechas de bota de piel curada o incluso piel más económica. La bota de piel curada significa que la bota de vino es fabricada con piel de vacuno. En otros países se fabrica con piel de búfalo, reno y foca. Sin embargo, ninguna de ellas tiene las características excepcionales de la bota española realizada con piel de vacuno y pez. Su aspecto es ligeramente envejecido, como el cuero sin pulir.
La bota de piel más económica está hecha de cordero, de una capa inferior, este tipo de piel es denominada serraje. Este tipo de piel es mucho más flexible y con un tacto aterciopelado. Cuando se usa este tipo de piel en la fabricación de la bota de vino, es necesario usar el látex para impermeabilizarla.
Los procesos de fabricación más modernos incorporan desde pieles de distintos animales hasta botas de vino de tela.
Personaliza la bota de tu vino favorito
Como ya anticipábamos antes, existen innumerables diseños o estampados de botas de vino. Para los más extravagantes, existen botas de pelo de cabra, de cebra y de pantera. Si eres un cazador o una persona que pasa las horas en el medio rural, también existe la bota de vino personalizada a tu estilo. Si eres todo un patriota, también podrás encontrar botas de vino con la bandera de tu país.
También se pueden encontrar auténticas obras de arte en las botas de vino. Estas botas de vino se usarán más como elemento de decoración, por ejemplo, de nuestra bodega personal, que un uso práctico. Existen diseños más flamencos, con estampados de camuflaje o un diseño que hayamos elegido nosotros.
No solo sirve para beber vino
La bota de vino no es solo una bota de vino, en el caso en el que el interior está hecho de pez, la bota puede conservar todo tipo de bebidas, desde agua hasta coñac. Las bebidas como el vino o los licores no azucarados pueden conservarse bastante tiempo en su interior sin degradarse. Sin embargo, es muy importante el trato y mantenimiento que se le dé a la bota de vino una vez que no se está usando. Es importante enjuagarlas cuando se cambia de bebida.
Si te quedas con gana de curiosear un poquito más sobre las tradiciones relacionadas con el vino, Folclore y vino: tradiciones populares asociadas al vino, o si quieres aprender más del vino, Curso de postureo con vino para molar en cualquier evento.